La velocidad de obturación es, simplemente, la velocidad a la que se abre y se cierra el obturador de una cámara, y va con un sistema de láminas. Se expresa en segundos y fracciones de segundo, y al salto de un valor a otro se denomina
punto.
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Apertura y cierre del obturador |
Como ya sabemos, el obturador está en el cuerpo de nuestra cámara. A diferencia del diafragma que controla la
intensidad , el obturador controla el
tiempo que tarda la luz en llegar al sensor. A mayor velocidad de obturación, menos luz le llega a este y viceversa.
Por lo tanto, en un sitio donde hay poca iluminación tendríamos que disminuir esa velocidad,como en un atardecer, en interiores o de noche. Y al contrario, cuando tenemos mucha iluminación, tendríamos que aumentar nuestra velocidad para que nuestra foto no se "queme".
Esos valores suelen variar entre 30" y 1/8000 segundos
Controlando la velocidad de la luz podremos conseguir diversos efectos en nuestras fotos y ser más creativos.
Podemos congelar una imagen con velocidades altas como, por ejemplo, un salto de agua o el vuelo de un pájaro. Los elementos estarán completamente estáticos.
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Salto de agua congelado |
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Vuelo de pájaro congelado
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Con velocidades muy lentas podemos conseguir el
efecto seda donde captamos mucho el movimiento.
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El mismo salto de agua a velocidad lenta
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Con velocidades lentas se capta el movimiento de las llamas |
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Salto de agua a velocidad intermedia |
Incluso podemos
¨pintar¨ con algún elemento que desprenda luz. Por ejemplo, las luces de un árbol navideño.
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Conseguimos el efecto moviendo la cámara mientras tomamos la foto. |
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